Apitoxina, alternativa en tratamiento de enfermedades crónicas

A través de la Ingeniería en Tecnologías Bioalimentarias de la UTVCO, Carlos Litwin, Alejandro Cruz y Marcial Pérez explicaron cómo obtener veneno de abeja y sus usos en la medicina moderna y la cosmetología

San Pablo Huixtepec, Oax. 29 de mayo de 2014.- La apitoxina o veneno de abeja es una alternativa en el tratamiento de enfermedades crónicas y en la cosmetología, así como de negocio para productores de  miel, sostuvo Carlos Litwin, ingeniero egresado de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires, Argentina, con 30 años en el tratamiento con apitoxina y uno de los máximos exponentes de su uso en Latinoamérica.

A través de la División de las carreras Tecnologías Bioalimentarias y Agricultura Sustentable y Protegida de la Universidad Tecnológica de los Valle Centrales de Oaxaca (UTVCO), el especialista impartió la conferencia-taller «Producción de veneno de abeja y sus usos terapéuticos» a apicultores, profesionales de la medicina, estudiosos de la medicina alternativa y estudiantes, a quienes explicó cómo obtener este subproducto de la colmena.

La apitoxina es el veneno secretado por las obreras de varias especies de abejas, que ejerce una acción analgésica y anti inflamatoria, lo que ha impulsado su uso en la apiterapia y hemoterapia.

El proceso para la obtención de la apitoxina se realiza mediante un alambre de plata industrial que tiene impulsos eléctricos para incentivar a las abejas a aguijonear una base de vidrio tipo lanceta colocado en un cajón y depositar ahí el veneno, el cual se deja secar por 24 horas y luego se retira en polvo para limpiarlo de algunos elementos contaminantes. Las abejas no pierden el aguijón por lo que no mueren, además que este método no interfiere en la producción de miel.

Carlos Litwin explicó que el proceso lleva de tres a cuatro horas y que para obtener un gramo de apitoxina que tiene un valor comercial entre 900 y 1200 pesos, se necesitan 10 mil abejas, considerando que por lo regular en una colmena hay alrededor de 60 mil abejas.
“Con un gramo se pueden hacer muchas ampolletas y kilos de crema”.

Entrevistado al término de la conferencia que ofreció en la cámara Gesell de la UTVCO, Litwin destacó la experiencia en 25 mil pacientes con reumas, problemas del nervio ciático, nervios de disco, dolores en articulaciones, artritis, artrosis, enfermedades crónicas autoinmunes, esclerosis múltiple quienes han experimentado beneficios. Dijo que en algunos casos presenta efectos anti cancerígenos, al igual que el veneno de serpiente.

Otro de los usos de la apitoxina es en la cosmetología en productos como geles y cremas para las arrugas y manchas en la piel. Para contactar a Carlos Litwin respecto al proceso de producción de apitoxina y sus usos terapéuticos se puede hacer a la dirección electrónica  apilatino@gmail.com

La conferencia promovida por la UTVCO también fue impartida por Jesús Alejandro Cruz Bastidas, naturópata, especialista en medicina tradicional china y posgraduado en terapia física y rehabilitación por la Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey, Cuba, y Marcial Pérez Isidro, productor de miel, cera, jalea real, polen y propóleo, con 30 años de experiencia en el cuidado y manejo de colmena.

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