Ruben Rios

En el último día de su gira por la entidad para escuchar a pueblos indígenas de las distintas regiones, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que estas visitas son para reiterar el compromiso de dar atención preferente a los pueblos originarios, tal como aprueba la mayoría de los mexicanos.

Luego de recordar que en todos los hogares indígenas se entregará al menos un apoyo del gobierno federal, el primer mandatario dijo que esto es posible gracias al ahorro generado por las acciones de combate a la corrupción y la eliminación de privilegios para funcionarios e integrantes de la clase política, como las pensiones de cinco millones de pesos a expresidentes:

“Ya se van a ir acostumbrando porque abusaron mucho; era como una casta dorada, se sentían los muy importantes y le dieron la espalda durante mucho tiempo al sufrimiento del pueblo.”

Por ello, informó que los programas sociales llegan a la gente humilde de todo el país y poco a poco serán atendidas las necesidades de cada región como la reciente expedición de licencias de pesca en la zona:

“Me da gusto que ya se hayan entregado estos permisos, ustedes siempre han cuidado el medio ambiente. Tiene que llevarse a cabo una explotación pesquera responsable, cuidar nuestros recursos naturales, no olvidar que toda la riqueza natural de México es de nosotros, de todos; de nuestra generación, pero también de las generaciones futuras.”

Aseguró que el fin de 26 años de neoliberalismo –periodo de mayor saqueo en la historia del país- permitirá retomar el trabajo de los Centros Coordinadores de Pueblos Indígenas (CCPI) creados en la década de 1970, periodo en que se estableció un vínculo importante con pueblos originarios, gracias también a la participación de académicos como Margarita Nolasco, Salomón Nahmad, Fernando Benítez o Ricardo Pozas.

“Era una época en que se volteaba a ver a las comunidades, a los pueblos; luego se les dio la espalda. Ahora de nuevo vamos a seguirnos viendo de frente, atendiendo a las comunidades y a los pueblos indígenas.”

Además de informar que las tres mil 500 escuelas de educación pública de Sonora recibirán recursos directos para el mejoramiento de planteles, el jefe del Ejecutivo federal dijo a maestras y maestros que la eliminación de la mal llamada reforma educativa dará paso a nuevas medidas, como la reincorporación de docentes despedidos.

“Esa es mi palabra y ese es mi compromiso: van a restablecerse las relaciones laborales con el magisterio.”

En cuanto a los planteamientos presentados durante el acto público, el presidente señaló:

“Vamos a atender las demandas, no crean que estoy miope, sí vi las cartulinas, la falta de agua, sí vi también el proyecto de ampliación de la carretera, todo eso lo vi, nada más que no es así como antes.

Ahora es lo que se tenga de recursos para el pueblo todo, pero con orden, para que no endeudemos al país, para que no tengamos que aumentar los impuestos, para que no haya gasolinazos. Orden. No se puede gastar más de lo que se tiene, de lo que ingresa a la hacienda pública, pero de esa forma van a irse resolviendo todas las peticiones y todas las demandas.”

En Punta Chueca, el presidente estuvo acompañado por el director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino Montes; la subsecretaria de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación (Segob), Diana Álvarez Mauri; y la presidenta municipal de Hermosillo, Célida Teresa López Cárdenas.

También lo acompañó el gobernador tradicional de la Nación Comca’ac en representación de las comunidades seri de Sonora, Saúl Gabriel Molina.

En representación de los pueblos indígenas, también acompañaron al presidente Citlalli Martínez Álvarez (indígenas migrantes triquis); Matías Valenzuela Esteban (pueblo pápago en México); Carlos Verlón José José (pueblo pápago en Arizona); Elizabeth Cortez Wilson (pueblo cucapá); Manuela Barbachán (pueblo kikapú); y Darío Galaviz Laos (pueblo pima).